domingo, 23 de enero de 2011

Una de tapas por Zaragoza

Hoy tengo ganas de mojarme y me voy a meter de lleno en un post con mucho jugo… TAPAS!!! Mucho se habla a lo largo y ancho del país acerca de las tapas y según te vas moviendo te das cuenta que en muchos sitios no significa lo mismo y el nivel es muy diferente. 

He dedicado alguna que otra hora de mis borracheras a discutir las diferencias entre tapa y ración y por supuesto donde son mejores, aquí van algunas de mis etílicas y subjetivas conclusiones. 

Mi primera sorpresa fue enterarme que por la zona centro, Madrid más concretamente, distinguen entra tapa (gratis) y ración (pagando). Mientras que en la zona norte, eso de dar una tapa gratis no se estila para nada, una tapa o pintxo se pide y se paga. Eso sí, con una gran diferencia, en el norte tiene mayor calidad. Las tapas gratis de Madrid se van al sota, caballo y rey: mis muy odiadas patatas bravas (generalmente grasientas y con salsa chunga), patatas con una mahonesa a reventar de ajo y algo perejil (no brother, si la pruebas esta noche no pillas) o cualquier variada fritanga que no se sabe de qué freidora moulinex ha salido. Pero no todo es sufrimiento, ni mucho menos, si sabes moverte bien puedes encontrar buenos bocados por la cara: la clásica tortilla de patata (hay sitios donde es excelente), lacón con pimentón (de mis favoritos) y si te ponen un plato de jamón by the filomatic le puedes dar un abrazo al camarero porque la cosa no puede ir a mejor.

Mahou, olivas y tortilla. Cominación perfecta.


A todos nos gusta la palabra gratis y lo de salir de cañas y comer sin rascarse el bolsillo está muy bien, gran punto de Madrid, pero la verdad de calidad e imaginación justita. Sin duda si hay que destacar algo prefiero la mahou perfectamente tiradas. Para encontrar tapas elaboradas y de calidad, me decanto por el norte. Mis ciudades fetiche serían San Sebastián, Tudela y Zaragoza.

Qué quieres que te diga, no es lo mismo que un tio te corte cuatro trozos de chorizo y te los pongan en un plato a que un cocinero invierta unos minutos de su tiempo en preparar una tapa más especial, por su originalidad, elaboración, combinación de ingredientes o simplemente calidad.

En fin, que el otro día me fui de tapas por Zaragoza, la ciudad del viento y aquí está el resultado:

Tortilla camarones y bola de espinacas. Bar Candolías,Pza. de los Sitios
Empezamos...

Tenía ganas de probar la tortilla de camarones y la verdad es que me gustó mucho, si hubiera estado recién hecha hubiera sido mejor, podría haber sido más crujiente. Pero sirvió para quitarme el mono que tenía desde que vi hace poco un documental de Cadiz. Más sobre tortilla de camarones
La bola de espinacas, no me gusto la masa, no sabía mucho a espinaca y en mi opinión había excesiva harina.

Bodegas Almau
Gran tapa

Dulce Anchoa = Crema de rulo de cabra + Anchoa en salmuera 
+ Confitura de tomate + Chocolate amargo. Bodegas Almau.

La tapa más interesante del recorrido. Resulta de la aplicación de la combinación de sabores al modo baturro, es decir, a lo exagerado. La combinación extraña en un principio, pero me gusto, el toque fuerte se lo da el queso y la anchoa, la confitura de tomate ayuda a suavizar y el toque del chocolate combinaba muy bien. Eso si, no esperemos matices y delicadeces rollo Mugaritz, aquí toca intensidad. Para algo estamos en Zaragoza co!!!!







Doña Casta
Croqueta de foie y boletus:  buen sabor y textura. Eso si a 2.4 euros la unidad, algo caras, pero merecen la pena.






Pascualillo
No solo de foie vive el hombre, también hay que meterle un poco a la casquería.

Madejas, no soy un gran fan, correctas, el  mayor sabor se lo da el ajo y perejil con el que están fritas.







Sesos rebozados, a más de uno no le molaran pero en el pascualillo es pecado no probarlos. Suaves y deliciosos.
Los sesos del pascualillo, toda una institución.


Para acabar esta gran ruta nos dejamos caer por el Gran Cafe de Zaragoza (calle AlfonsoI) a tomarnos un Gin Tonic, sumado a las ambars que nos habíamos echado nos dejó en el punto perfecto para la siestecita de rigor. 

Gracias al gran Marius que hizo de Cicerón y contertulio, además tuvo la paciencia de aguantar las fotitos jejeje.
G&T


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